El pasado 18 de noviembre realizaba su primer presentación en Argentina la banda japonesa Asian Kung-fu Generation. Una cola de dos cuadras esperaba ansiosamente ingresar al Teatro Vorterix. Se lograba percibir en todos la adrenalina y esas ansias de poder hacer pogo con “Mirai no Kakera” o sentir los acordes de “Blue Train”. Aquellos que compraron el VIP, obtuvieron una credencial conmemorativa y el ingreso prioritario, que les permitió conocerlos en persona y así obtener el saludo de la banda y su autógrafo.
Con la lluvia que se avecinaba amenazante en el cielo de Buenos Aires, ingresaban las ultimas personas al teatro. Pasados unos minutos de las 21 hs, con aplausos y al grito de “AJIKAN, AJIKAN” hacía el ingreso al escenario AKFG, comenzando su presentación, sin ningún preámbulo, con “Easter” el corte de su single lanzado en mayo. Un juego de luces en rojo y azul, el gran pájaro de AKFG de fondo al escenario y la energía que iba en aumento, hacían al clima de un gran show.
“Gracias. Hola, ¿Cómo están? Nosotros somos Asian kung-fu Generation” fueron las primeras palabras de Gotch, el líder de la banda, después tocar su tercer tema “After Dark”, despertando los gritos y la ovación de sus fans. Continuando así, en un hermoso espíritu de fiesta, con “sorewa, mata ashita”.
El pogo amistoso con los brazos en alza, los celulares levantados para capturar ese momento único, los aplausos, los bailes y los gritos, no cesaron durante la mágica noche. Con gran calidez Gotch pronunciaba “gracias” y “arigató” levantando la guitarra hacia sus fans.
En mitad del show regaló unas palabras en japonés con mímicas. Algo de lo que se pudo rescatar de sus palabras fue que se sentía muy a gusto en Buenos Aires, “Buenos Aires como Tokio” expresaba, “Arigato, gracias, ¿Vamos a pasarlo bien?”.
Casi al finalizar la noche, el humo artificial invadía el escenario del Vorterix y sumado al juego de luces, comenzaban a sonar los primeros acordes de “Rewrite” el Opening de Full Metal Alchemist, hubo un estallido de gritos de “Hey, hey, hey”. Todos bailaban, algunos fans levantaban sus puños, otros cerraban sus ojos y entonaban junto a la banda la letra de este éxito. Como si aquello fuera poco, después del eufórico coro “keshite riraito shite, kudaranai chou gensou, wasureranu sonzai kan wo” de “Rewrite” comenzaba a sonar, con un sonido majestuoso, “Haruka Kanata” el exitoso Opening de Naruto. La gente que apenas estaba saliendo del calor del pogo, volvía a colocarse en el centro del teatro rápidamente, donde la alegría se mostraba estampada en las caras de todos los que participaban.
Llegaba el momento de presentar a los integrantes. Señalando a cada uno Gotch los nombraba. A su derecha estaba Kensui, Guitarrista líder y vocalista de fondo, pero principal vocalista en “Uso to wonderland”, canción de la cual se había podido disfrutar en mitad del show. Detrás y con sus palillos en alto se encontraba Kiyoshi, en la batería. Y a su izquierda, haciendo reverencia y con una gran sonrisa, estaba Yama-chan bajista y vocalista de fondo.
Con los últimos acordes de “wonder Future” se apagaban las luces, se descolgaban los instrumentos y se retiraban del escenario acompañados de toda la energía de su público, al cual, las casi dos horas amenas y de alegría, parecían serles insuficientes y con el clásico “Ole, Ole, Ole…” y al grito de “AJIKAN, AJIKAN” incitaban su regreso al escenario, que no se hizo esperar. Esta vez Gotch ingresaba con la camiseta argentina, “I feel like Messi” decía, y luego mostraba de espaldas al público el número 10 en su camiseta. El show continuó con “loop & loop”, “Kimi to iu Hana” y “Mirai no kakera”, como despedida, culminando con “Opera glass”.
Siendo las 23hs, y tras dos horas de un show intenso con un set-list de 25 canciones, la noche llegaba a su fin. Los muchachos se abrazaron frente al escenario y con una reverencia saludaban alegremente a su público que habia esperado este día con mucha ansiedad. Por ultimo lanzaron púas y palillos que utilizaron durante la presentación para que sus fans pudieran tener otro recuerdo inolvidable de su visita al país.
Texto: Florencia Girasole / Fotografías: Pablo Pendanx