Hablamos con Alén y Mai de cara a su show en el estadio de River junto a La Beriso para charlar sobre sus expectativas, la corta pero intensa y creciente trayectoria de Ciclonautas, su más reciente disco de estudio, y mucho más.
Al momento de formar Ciclonautas, y teniendo en cuenta que cada uno ya venía con una larga trayectoria detrás, ¿qué inquietudes y expectativas nacían con este proyecto?
Alén: ¿Inquietudes? Las mismas que cuando cualquiera de los tres afrontamos un nuevo proyecto, tratar de pasarlo lo mejor posible, evolucionar y disfrutar por partida doble de las canciones: creándolas y defendiéndolas en directo, la verdadera razón de ser de todo esto.
Son una banda joven y en poco tiempo crecieron muchísimo ¿En qué momento se dio ese gran salto? ¿Fue repentino?
Alén: Nuestra trayectoria es corta pero intensa, muy intensa. Pero a pesar de ello todo nos ha ido sucediendo paso a paso, poco a poco. Cuando paremos después de estos 6 conciertos que nos quedan miraremos atrás y valoraremos lo conseguido en estos dos años y medio. Aún no somos conscientes de ello.
¿Cuáles fueron los desafíos de este segundo disco Bienvenidos los muertos, que es además con el que se presentarán por primera vez en nuestro país?
Alén: Dejar el listón, cuando menos, a la altura que quedó tras nuestra primera gira, la de presentación de Qué tal?: Un tour que terminamos por todo lo alto, compartiendo escenario con Slash en Madrid Y Barcelona.
¿Cómo fue la experiencia de componer con artistas como Iñaki de Extremoduro o Marc Ford de Black Crowes?
Mai: Cuando hay invitados del nivel y de las características de Iñaki Antón y Marc Ford lo que se busca es que sumen a las canciones, que las vistan aportando mucho gusto. Y lo hicieron con creces.
Tanto para Alén y Txo como para Mai ¿Cómo es su vínculo con el rock argentino, cuáles son sus bandas preferidas y por qué? ¿Cómo llevan adelante esas influencias a la hora de componer?
Mai: Me gustan muchas bandas, pues yo soy argentino: Pappo, los Redondos (Redonditos de Ricota), Indio Solari, Divididos, Pescado Rabioso, Maná… Toda esta gente armó cimientos para que el rock argentino tenga la salud que tiene y su sello propio, en creatividad y sonido.
Abrieron los conciertos de Slash, tocaron en festivales de Europa e hicieron alrededor de 80 shows, ¿qué expectativas tienen de cara a su primer show en argentina?
Mai: Grandes esperanzas. Estamos muy emocionados, por ser nuestra primera vez allí. Además yo soy de allá.
Alén: Tocar en semejante lugar la primera vez que vamos a Argentina es para pellizcarse; es algo que te hace pensar que todo esfuerzo merece la pena. Eso mola mucho, y compensa todo el sacrificio que conlleva dedicarle la vida al rock
¿Qué significa para ustedes presentarse en un gran estadio como el de River Plate junto a La Beriso?
Alén: A River vamos porque muy cortésmente nos ha invitado La Beriso. Se han portado con nosotros de maravilla, están trabajando duro para que podamos trabajar allí y hacer las cosas bien. Gracias a ellos vamos a poder editar nuestros discos. Todavía no podemos creernos que vayamos a abrir para ellos en River.
Luego de terminar la gira que presenta este último disco, ¿tienen pensado volver a los estudios a grabar?
Mai: Tenemos algunas ideas a las que estamos dando vueltas, a la espera de darles su tiempo de maduración. Creo que para 2017 algo nuevo pintará que hará que volvamos a ilusionarnos y juntarnos en la bajera a tocar.
¿Algo que quieran decirles a sus seguidores argentinos antes del show?
Alén: Hacemos un show de rock al más puro estilo tradicional. Tratamos de dejarnos la piel, de ir yendo de menos a más, para que le dé tiempo a todo el mundo a unirse al concierto, a contagiarse y explotar. Eso lo logramos casi siempre: algunas veces con más esfuerzo que otras, algo que también depende de la predisposición del público. Tratamos de hacer un show que empiece fuerte, baje un poquito y después vuelva a subir hasta explotar: tal y como lo que tiene que ser un buen show de rock.
Entrevista: Carolina Bramajo / Fotografías: Prensa Ciclonautas